La Fundación Cajamar Comunidad Valenciana ha presentado el resultado de sus trabajos de investigación agroalimentaria, entre los que destacan la obtención de más de 300 variedades hortofrutícolas y nuevas líneas de cultivo que permiten obtener frutas y verduras con “Residuo Cero”, a través de técnicas de producción ecológica como integrada, con el objetivo de obtener un producto lo más natural posible libre de residuos fitosanitarios y pesticidas.
El director de Negocio Agroalimentario y Cooperativo del Grupo Cajamar, Roberto García Torrente, ha señalado que “esta característica es especialmente interesante para el agricultor y productor, ya que no supone un coste añadido de producción y el mercado valora cada vez más el producto agrario natural o ecológico. La demanda de los supermercados en la búsqueda de productos libres de residuos ha aumentado de forma importante en los últimos años”.
El Centro de Experiencias de la Fundación Cajamar ha dedicado una hectárea de sus instalaciones a investigar las técnicas para conseguir dicho “Residuo Cero” en ocho cultivos: cuatro de verano (tomate, calabaza, melón y sandía) y cuatro de invierno (alcachofa, coliflor, hinojo y col china). En el 90% de los casos los ensayos han permitido reducir a cero la presencia de fitosanitarios en las frutas y verduras.
Para conseguir este “Residuo Cero” se utilizan varias estrategias como el uso de insectos y ácaros que potencian la presencia de organismos favorecedores de la eliminación de plaguicidas o el empleo de técnicas biotecnológicas basadas en la confusión sexual o la captura masiva, que respetan a la fauna útil.
Según ha explicado el director del Centro de Experiencias de Cajamar, Carlos Baixauli, “los fitosanitarios o insecticidas se utilizan solo si es necesario y en las primeras fases del cultivo, de modo que las técnicas investigadas aplicadas a la curva de degradación del producto consiguen que no haya residuos en el momento de la recolección”.
La entidad tiene previsto transferir todo este conocimiento a las cooperativas y agricultores interesados a través de cursos de formación y publicaciones especializadas.
El buen uso de los recursos naturales es otra de las líneas de investigación del Centro de Experiencias de la Fundación Cajamar. Carlos Baixauli ha precisado que “los avances en dosis de riego permitirán ajustar el agua utilizada a las necesidades del cultivo. Las pruebas se han realizado con melón, tomate, pimiento y granado, y en conjunto se ha conseguido reducir un 20% el agua utilizada hasta el momento, un logro importante al tratarse de un bien escaso y limitado”.
Los portainjertos son un método muy eficaz para conseguir un manejo más equilibrado del agua de riego, ya que al conseguir plantas más vigorosas necesitan menos periodo de riego, e incluso se pueden utilizar aguas de menor calidad.